Esto es una roca,
aquello es el mar.
A la mañana la escarcha cubre flores y coches.
Ya se va calmando el llanto del niño.
En invierno tiñe el blanco montañas.
Espera el silbido de la tetera
y sirve humeante su zumo negro.
En ocasiones, lo revolucionario es decir lo evidente
Cataluña es España,
España es Cataluña.
No hay secesión en el Derecho internacional.
Soberanía no nos quitarán.
La inmersión no es un modelo de éxito.
Hay adoctrinamiento nacional,
no es la estelada bandera de paz.
miércoles, 30 de enero de 2019
miércoles, 2 de enero de 2019
Islas
Son tranquilas las tardes en las islas.
Se oscurecen los bordes de las fotos
que miramos sentados aguardando.
Tintinean los vasos y la música...
¡Ah, la música! Viene y nos recuerda
que ya fuimos eternos, inmortales.
Nos recuerda veranos de verbena,
labios húmedos, piernas entreabiertas.
Fuera es de noche,
una noche larga
en esta tierra extraña
que no es la nuestra.
Se mezclan los olores de papayas,
claveles y adormidera.
Esperamos.
Esperamos que vuelvan
noches de verbena
y piernas entreabiertas.
Diletamos al borde de la mar
en esta tierra extraña
que no es la nuestra.
Rememoramos el día.
Fondo azul en la piscina,
un zumo que desciende cristalino,
el aire seco y frío en la montaña,
un barco que veloz cruza las olas,
el mundo detenido al contemplar
la montaña suspendida
sobre océanos y bosques.
Rememoramos...
pero también deseamos
que vuelva a amanacer
una y otra vez.
Rogamos
que se aclaren los bordes de las fotos
que regresen veranos de verbenas,
que esta noche larga no oscurezca.
Imaginamos
días sin fin,
luz que no cesa.
Sabemos
que el mar está siempre cerca.
Se oscurecen los bordes de las fotos
que miramos sentados aguardando.
Tintinean los vasos y la música...
¡Ah, la música! Viene y nos recuerda
que ya fuimos eternos, inmortales.
Nos recuerda veranos de verbena,
labios húmedos, piernas entreabiertas.
Fuera es de noche,
una noche larga
en esta tierra extraña
que no es la nuestra.
Se mezclan los olores de papayas,
claveles y adormidera.
Esperamos.
Esperamos que vuelvan
noches de verbena
y piernas entreabiertas.
Diletamos al borde de la mar
en esta tierra extraña
que no es la nuestra.
Rememoramos el día.
Fondo azul en la piscina,
un zumo que desciende cristalino,
el aire seco y frío en la montaña,
un barco que veloz cruza las olas,
el mundo detenido al contemplar
la montaña suspendida
sobre océanos y bosques.
Rememoramos...
pero también deseamos
que vuelva a amanacer
una y otra vez.
Rogamos
que se aclaren los bordes de las fotos
que regresen veranos de verbenas,
que esta noche larga no oscurezca.
Imaginamos
días sin fin,
luz que no cesa.
Sabemos
que el mar está siempre cerca.
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