junto a la mía
en el río.
Recuerdo el aire frío,
recuerdo el bosque
y las nubes.
Recuerdo la roca
en la que apoyaba
mi espalda
torturada.
Recuerdo aquella tarde
y tus ojos.
Recuerdo tus mejillas,
tus negros cabellos.
Recuerdo tu pierna
blanca,
casi la tocaba.
Mil veces he muerto
desde aquel día.
Mil veces he disfrazado
aquel momento.
Mil veces he buscado
el río el bosque, las nubes
y el cielo.
Mil veces he llorado
sin motivo.
Hoy lo escribo,
algo me ha recordado
que estuve vivo.