Cuando finalmente, oh diosa, te dignes a visitarme encontraras las puertas cerradas, los muros cubiertos de escarcha. Tan sólo el vaho responderá a tu aliento. El hielo será tu compañero. Yo, entretanto, te esperaré, inmóvil, con el corazón en la mano,
Hola Daniel, en realidad estas palabras nacieron como comentario a un poema de Valdemar Canaris (Rafael R. Costa). Valdemar borró su blog; pero yo conservé el comentario y ahora, tras bastante tiempo, y no se por qué, se me ha ocurrido colgarlo aquí. Lamento no tener el poema al que esto servía de comentario, porque entonces tendría más sentido; aunque, claro, una vez que está escrito los sentidos ya pueden ser muchos, incluso alguno desconocido para el propio autor. Un abrazo.
4 comentarios:
Buen latigazo. ¿Merecido o no? Lo desconozco, pero parece que tu musa se lo merecía.
Un abrazo, Rafael.
Paz.
Daniel.
Hermosos versos a pesar del...¿desamor?...¿desesperanza?..
es lo de menos
amigo: existe un foro llamado MAR DE LAS 9 MUSAS, donde tu huella poètica se verìa maravillosamente
http://www.mardelas9musas.com/n
abrazos
p.d. mira por donde me encuentro con Daniel que se me habìa perdido
Hola Daniel,
en realidad estas palabras nacieron como comentario a un poema de Valdemar Canaris (Rafael R. Costa). Valdemar borró su blog; pero yo conservé el comentario y ahora, tras bastante tiempo, y no se por qué, se me ha ocurrido colgarlo aquí.
Lamento no tener el poema al que esto servía de comentario, porque entonces tendría más sentido; aunque, claro, una vez que está escrito los sentidos ya pueden ser muchos, incluso alguno desconocido para el propio autor.
Un abrazo.
Hola Armida,
gracias por pasarte y por el comentario. Visitaré la dirección que me indicas.
Un abrazo.
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